
Elegir el préstamo que mejor se adapte a nuestras necesidades es uno de los pasos más importantes en la compra de su vivienda: negociar bien con el banco las comisiones, el tipo de interés o los productos vinculados, será decisivo para no equivocarse.
1.- Consulte tres bancos. El suyo y tres más. Y nunca firme nada mientras compara. En internet hay herramientas, los comparadores hipotecarios, que calculan la cuota mensual o los gastos en amortizaciones.
2.- Rebaje el diferencial. Aunque el euríbor está bajo, intente que el diferencial sea lo más bajo posible, ya que no sabemos cuando va a subir. Lo más común es pactar con el banco la contratación de otros productos financieros, pero averigüe si esto no encarecerá el coste total de la hipoteca.
3.- Vigile las comisiones. Ahora los bancos exigen muchas más comisiones antes de conceder la hipoteca (apertura, estudio …). Dependerá de la entidad y de nuestra solvencia como clientes. Por lo tanto, tenemos que intentar suprimir o reducir alguna de ellas. Una buena manera es «mostrar» otras ofertas hipotecarias como medida de fuerza.
4.- Negocie productos vinculados. Fondos de inversión, seguro de vida, plan de pensiones, etc … pueden ser obligatorios para que el banco conceda la hipoteca. Tendremos que jugar con ello a cambio de unas mejores condiciones.
5.- Acepte sólo los seguros obligatorios. El mínimo por ley es el de incendios. Algunas entidades ahora procuran que el cliente suscriba una de protección de pagos ante el paro y la precariedad laboral. Puede buscar por su cuenta en una aseguradora y cambiarlo cuando pase el año obligado, preavisando con dos meses de antelación.
6.- Las condiciones, por escrito. Hay que solicitar la oferta vinculante, el banco tiene obligación de darla, con todas las condiciones definitivas. Antes compruebe que la Escritura coincide con la oferta vinculante.
7.- Asesoramiento profesional. Obtener una hipoteca es complicado. Es importante consultar a un asesor hipotecario a tiempo y evitar arrepentirse después.